La crisis del covid 19 ha traído consigo muchos cambios que van más allá del sector de la salud, de hecho se ha convertido en todo un revulsivo para muchos trabajos que antes se hacían de manera presencial y ahora se han visto obligados a adaptarse a un nuevo contexto a “distancia”.
Se estima que el 80% de las empresas españolas han tenido que implementar diferentes soluciones de teletrabajo o derivadas del mismo para poder continuar con su nivel de actividad, convirtiéndose así en una cuestión de supervivencia para ellas.
Nueva normalidad, nuevas necesidades
Se está dando un cambio de mentalidad en lo que respecta al trabajo, trabajadores y a la inversión que se venía haciendo tradicionalmente en las oficinas.
Por una parte, los trabajadores demandan espacios seguros, higienizados y que reduzcan al mínimo el contacto con otras personas, lo que termina llevando a que el teletrabajo sea una demanda activa para su actividad laboral.
Y por otra parte, la situación actual ha ayudado a que muchos oficios y trabajos que no terminaban de dar el paso telemático, se hayan visto obligados a saltar y a comprobar que no había un precipicio esperándolos, sino una alternativa moderna, adecuada y viable para su desarrollo.
El Coworking tiene mucho que aportar
La actual situación ha hecho que muchas empresas y autónomos vean en la oficinas un espacio y gasto que se puede reducir o que se puede trasladar a lugares de co-working. Estos espacios ofrecen un evidente ahorro, convirtiéndose así en los lugares adecuados para mantener pequeñas reuniones puntuales o donde los trabajadores clave desarrollen su actividad principal.
Ahorro, eficacia, modernidad y seguridad se dan la mano en espacios de co-working para ayudar a que las empresas den el siguiente salto en su evolución natural.
Los grandes beneficios están ahí
Si hay algo claro en el contexto actual, es que la demanda de espacio por parte de las empresas va a diversificarse hacia las oficinas y espacios más pequeños y flexibles. Esta demanda va a venir en ocasiones por parte de las empresas y en otras de unos trabajadores que ven el potencial y la seguridad del teletrabajo.
En esa situación, son los espacios de co-working los que tienen todo lo requerido para suplir necesidades de empresas, trabajadores y autónomos por igual: horarios flexibles, distanciamiento social, trabajo aislado fuera de las distracciones del hogar, eficiencia y ahorro en gasto de transporte y combustible, etc., lo que los convierte en los espacios imprescindibles para el futuro de los negocios.
2020 quedará como un año para recordar por sus diversos sucesos clave en nuestra historia, pero también lo hará por ser el año en el que el valor de los espacios de co-working y el teletrabajo se materializaron definitivamente para empresas, trabajadores y autónomos.
Este nuevo contexto traerá consigo nuevos desafíos donde los lugares de co-working tienen mucho que ofrecer y qué decir.